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Los humanos han existido por millones de años como parte de la naturaleza. Pero luego algo cambió. Y en muy poco tiempo nosotros terraformamos este planeta y lo diseñamos para satisfacer nuestras necesidades. Hasta donde sabemos, somos los primeros seres en despertarnos y tomar el control del planeta.
La transición de cazar y recolectar a cultivar y construir, fue tan increíblemente rápida, que muchas de las maneras de pensar sobre el mundo ya no son útiles. Una de las ideas más obsoletas, es que el calendario mayormente utilizado en el mundo insiste en que vivimos en el año 2023. Esto distorsiona la visión de nuestra propia historia. Dificulta entender quienes somos como especie y que tan lejos hemos llegado en una increíblemente corta cantidad de tiempo.
Por ello, ya es tiempo de que escojamos un año cero para la humanidad. Un año cero, que realmente nos represente como especie. Que incluya a todas las culturas. Un año cero, que marque cuando se comenzó a construir nuestro mundo sobre el antiguo.
El primer Templo
El primer Templo
Hace 12 mil años, cientos de humanos se reunieron en las colinas del sur de Anatolia. Eran cazadores y recolectores, sin ningún conocimiento de agricultura o metalúrgica. Todo lo que tenían eran herramientas hechas de madera y piedra.
Pero construyeron el primer proyecto de una gran edificación de la humanidad 7 mil años antes, que la construcción de las pirámides en Egipto. Dispersados alrededor de 300 metros. Nuestros ancestros levantaron círculos de pilares de piedras gigantescas, cada una de ellas de hasta 6 metros de altura y 40 toneladas de peso.
Decoradas con pictogramas de animales y criaturas mitológicas, talladas en piedra. No tenemos idea de cómo fueron capaces de hacer esto. Probablemente fue un proyecto de proporciones épicas para la era de piedra. Requiriendo un nivel de organización, que no sabías que los primeros humanos eran capaces de tener hasta que encontramos este sitio.
¿Por qué lo construyeron? La idea más popular es que este fue el primer templo de la humanidad. Dedicado a dioses, ya hace en tiempos olvidados. Solo se sabe que este proyecto, el primero de su tipo, marca el principio de una nueva era. Es en esta área, alrededor de ese tiempo, que los humanos verdaderamente comenzamos a construir nuestro propio mundo.
El cual se convierte en un hito histórico, apropiado para el comienzo de nuestro calendario. Este momento en el tiempo, es tan distintivo que el científico Cesare Emiliani, propone que la humanidad debería cambiar a lo que él llama “el calendario Holoceno”. Adhiriendo 10 mil años a nuestro actual calendario Gregoriano.
No necesitaríamos cambiar los días, meses y los festejos religiosos ya establecidos, se podrían mantener iguales. Pero para todos los propósitos oficiales, nuestro año actual sería el 12.023 de la Era Humana. Esto alteraría dramáticamente como pensamos la historia y cómo se siente. Hagamos un breve repaso y viajemos a través de nuestra nueva historia desde nuestro “Nuevo Año Cero”.
Una nueva historia humana
Una nueva historia humana
Hace 12 mil años atrás, vimos el principio de nuestro primer proyecto de construcción comenzando nuestra historia. Estaría en uso unos 2 mil años. Y llevó 8 milenios hasta que Jericó, probablemente la primera ciudad en la tierra fuera fundada en el año mil después del comienzo de la era humana. El progreso era extremadamente lento.
En este punto, en los siguientes mil años más y más establecimientos permanentes aparecieron alrededor del mundo. Más y más animales y plantas, fueron domesticados como productos agrícolas.
En esta época, se encontraron evidencias de comercio alrededor de miles de kilómetros. Cerca de 5 millones de humanos estaban vivos en este periodo de la historia, menos de los que viven en Londres en la actualidad.
La tecnología avanzó constantemente a un ritmo lento. La alfarería se dispersó ampliamente. Las primeras comunidades culturales aparecieron en China, India y el Creciente Fértil. Alrededor del año 4 mil, 8 mil años antes que la actualidad, los humanos comenzaron a usar metales por primera vez. Aprendiendo a mezclar aluminio con cobre y comenzado lo que conocemos como la Edad de Bronce, alrededor del año 5 mil.
El primer prototipo de escritura apareció y se inventó la rueda. En Sudamérica, la Cultura Chinchorro comenzó a momificar personas artificialmente, 2 mil años antes que el antiguo Egipto. Las primeras grandes culturas surgieron alrededor del año 7 mil. La civilización del valle del Indo, el Antiguo Egipto, la civilización Micénica en Grecia y los Sumerios en Mesopotamia. El Stonehenge fué construido en Bretaña y la primera dinastía surgió en China.
Lo que considerábamos historia, acababa de empezar y las cosas empezaron a tomarse con calma, mientras la población mundial superaba los 30 millones de personas. Un número de nuevas grandes culturas aparecieron en el mundo. De las cuáles muchas de ellas escribían sobre sus leyendas. Más ciudades fueron fundadas. En Sudamérica la cultura Olmeca emergió.
En este tiempo, la conquista de Troya se supone que pasó. Tiempo después en el Medio Oriente en el creciente fértil, la Edad del Bronce terminó con violencia. Todas las culturas presentes en la Edad del Bronce excepto Egipto fueron destruidas por invasores desconocidos. Así el progreso de la humanidad se estancó por cientos años.
Por el año 9 mil 500, lo que consideramos la cultura europea empezó. Las ciudades-estado Griegas superaron la invasión persa, dando así inicio a la edad de oro Griega. Terminada por Alejandro Magno, alrededor del año 9 mil 700, 100 años después el ejército romano destruyó Cartago y comenzó a ser un ejército dominante. César fue asesinado en el año 9 mil 956. Mientras la población mundial alcanzaba los 300 millones.
En resumen...
En resumen...
Recién en el año 10 mil, alcanzamos el punto donde empieza el calendario gregoriano. Apenas 2 mil años desde ahora, los humanos caminarán en la luna. Si pensamos en la historia como lo hacemos ahora.
Nos estaríamos saltando 10 mil años de avances y progresos. Incluyendo todo en nuestro calendario, hace nuestro pasado más impresionante. Nos muestra cómo el progreso se volvió exponencial con el tiempo e incorpora todos los humanos de todas las culturas en nuestro calendario.
Un nuevo año cero en nuestra historia podría cambiar en cómo pensamos nosotros. Cómo un proyecto que empezó hace 12 mil años, cuando por primera vez nuestros ancestros se juntaron para construir un templo de guijarro (piedra).
Con herramientas hechas de piedra. Sin saber que pondría en duda ¿Dónde nos llevaría como especie? Desde construir el primer templo hasta naves volando más allá del cielo.
REFERENCIAS:Blainey, Geoffery (2000). A short history of the world. Penguin Books, Victoria. ISBN 0-670-88036-1Williams, H. S. (1904). The history of the world.
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